La Planeación Estratégica no es un concepto que está de moda, de hecho ha sido la herramienta administrativa más poderosa desde tiempos remotos para alcanzar el éxito en la guerra, en la política, en diversos deportes y en empresas.

El gerente de las empresas está llamado a asumir un papel protagónico en la construcción de una planeación estratégica que deje de lado la improvisación y defina un proyecto hacia futuro. El actual contexto empresarial exige que los gerentes calculen cada vez más sus pasos en el corto, mediano y largo plazo, y el capital humano actúe y cumpla las condiciones de llevar a buen término el objetivo de la planeación.

Se preguntarán, por qué la importancia de hacer planeación en las empresas, y la respuesta se resume en tres aspectos claves, argumentados por Hernando Zabala Salazar, docente de Ciencias Administrativas y escritor del Libro Planeación Estratégica aplicada a Cooperativas, quien enfatiza en la preocupación por los resultados de la gestión en la empresa; la escasez de recursos disponibles en lo inmediato para establecer elementos materiales e inmateriales que se necesitan y la complejidad del trabajo, que deberá tener acciones donde se domine la complejidad del entorno. 

Con base en esto, la preocupación por los resultados, la escasez de recursos disponibles y la complejidad del trabajo, son los pilares que un gerente con pensamiento estratégico debe considerar para diseñar ese futuro deseado donde puedan crearse ventajas competitivas permanentes y diferenciadas. 

La planeación estratégica será para los gerentes de las empresas la ruta a seguir donde se identifican las áreas problemáticas, se elaboran alternativas razonables y se proyecta la acción, de esta manera, se prevén los problemas y se establecen medidas correctivas antes de que estos se hagan críticos. Le puede interesar Gestión estratégica en tiempos de crisis.

En definitiva, con la planeación el gerente precisa los resultados deseados, se establecen planes concretos de acción, se minimizan riesgos, de tal manera que permite incrementar los ingresos y rentabilidad, tener mayor participación en el mercado, mejora retorno de inversión, reduce costos y racionaliza recursos, en conclusión, con la planeación estratégica se dota a la organización de instrumentos y mecanismos claros y precisos que orientan su desarrollo y contribuyen alcanzar mayores niveles de coordinación.  

Con todo esto, dentro del marco de la Planeación Estratégica, los gerentes deben tener claro dos ejes fundamentales para su cumplimiento, el primero es la Formulación Estratégica, orientada por el análisis DAFO, Cinco fuerzas; coherencia entre misión, visión y valores; determinar retos y objetivos SMART. El segundo eje son las Líneas de Acción, compuesta por la Formulación de líneas de acción, Indicadores estratégicos, Preparación del equipo y Presentación del Plan.

Es así, como el gerente tendrá que identificar y especificar fines para toda la empresa, siendo esto lo más importante y el primer paso en la planeación. De esta manera,  el gerente persigue un propósito fundamental y es obtener beneficios por medio del uso eficiente y eficaz de los factores administrativos.